19 febrero 2008

*Predicación 17/02/'08 “La verdad os hará libres”

Dice un viejo proverbio Ruso “la verdad mas amarga es mejor que la mentira mas dulce”. La mayoría de las personas estamos muy dispuestas y abiertas para ver y “ayudar” a los demás al exponer las fallas o áreas de oportunidad de los demás, muchos hemos llegado a un grado de conocimiento que consideramos casi casi, como un don, o iluminación divina y en ocasiones llegamos a decir cosas como “esto me duele mas a mi que a ti” o “te lo digo porque te amo” y honestamente en mi corazón se que muchas veces es verdad. Se que suena chistoso y asta nos reímos al escuchar estas frases expuestas abiertamente y planteadas como algo que dicen otras personas y es precisamente al punto al que me gustaría llegar. Cuales son las verdades ocultas que hay en mi interior y que no soy capaz de ver? Cuales son las historias que me invento? Y cuales son las cosas por las que he luchado y no he conseguido a pesar de que he puesto mi mejor esfuerzo?.

Repasemos a un personaje muy polémico en la Biblia, Judas, yo pienso que cualquiera que dejara todo y allá seguido a Jesús en un momento histórico tan difícil en verdad tenia un gran deseo en su corazón de ser como su maestro, un enorme deseo de ser un verdadero seguidor, digo andar de pueblo en pueblo, viviendo de la caridad, confiando en la divina providencia, son muestras mas que inequívocas de su buena disposición para servir y llevar la palabra de Dios a todas partes. El no mostró ningún rasgo que lo definiera como mejor o pero que cualquiera de los otros seguidores incluso cuando Jesús volvió de entre los muertos Tomas dudo de Jesús mismo sobre su identidad, puesto que en su inteligencia, que no dudo que fuera mucha, nadie había vuelto de entre los muertos, su lógica su idea del mundo no decía nada sobre eso. Pedro dudo de la palabra de Jesús cuando le dijo que caminara sobre el mar y no porque Pedro fuera un gran físico pero era pescador sabía perfectamente lo que te pasaba justo después de pararte sobre el agua, ellos sabían que de lo que hablaban, no tenían ideas preconcebidas del agua o de los ciclos de la vida todas estas eran cosa palpables.

Recordemos aquel caso en el que una mujer desesperada por la enfermedad de su hija acude a Jesús y los discípulos le dicen a Jesús que la aleje, hay quien pueda decir, es que así era en aquella época, pero de igual forma sigue pareciendo algo rudo.

Volviendo a Judas, el en verdad tenía un deseo verdadero de seguir a Cristo, entonces por que lo traiciono? Podría tener un sin numero de buenas razones para hacerlo, miedo a perderlo todo incluyendo la vida, que de hecho era lo único, además de su túnica que poseía, puesto que recordemos que todos los discípulos dejaron padre, madre y demás posesiones terrenales para seguir a Cristo. La oferta de los romanos era tentadora, Jesús ya la tenía perdida y pues de nada a algo todo es ganancia.

Y podríamos decir, es que no tenía amor, porque “aunque hablase con la voz de los ángeles si no tengo amor nada tengo”, créanme por lo que se puede ver había un gran amor en Judas, defendía lo que el entendía que estaba bien de lo que entendía que estaba mal, tal vez equivocadamente pero con mucho amor yo al menos no lo dudo porque aguanto las reprimendas de Jesús y ya me imagino las que le daba su propia conciencia y tal fue así el caso que cuando traiciono a Jesús se suicido, asta donde no estaría el conciente de su traición, porque solo alguien que no es bueno no esta conciente de su maldad, todos somos susceptibles de cometer una traición. Y si alguien dice que no ahora mismo me pongo a escribir en la arena y que arroje la primera piedra el que este libre de pecado.

Entonces que tiene que ver “la verdad” en todo esto? Créanme tiene que ver mucho, el caso es que aunque en muchas ocasiones deseamos de corazón volvernos mejores personas y abandonar al viejo hombre o mujer que llevamos dentro, existen en nuestra mente deseos concebidos con anterioridad que en su momento o en momentos decisivos en nuestra vida nos han ayudado a salir del paso en situaciones difíciles y que hemos vuelto parte de nuestro “modus operandis”. Todas estas actitudes no son malas en si mismas, el problema es que el momento histórico en que fueron virtudes ya paso y en este momento de nuestra vida se vuelven obstáculos que nos impiden lograr los objetivos que deseamos alcanzar.

Y aquí tenemos la primera y mas grande traición que existe después de la traición a Jesús, la traición a uno mismo, y es una traición involuntaria derivada de anteriores experiencias, esto es derivada de las experiencias que nos han ayudado a sobrevivir asta el día de hoy pero que desgraciadamente al paso de el tiempo se han vuelto un ancla que impide nuestro desarrollo espiritual y humano.

Desafortunadamente descubrir esos obstáculos internos es muy difícil, ya que no los vemos, están tan bien camuflageados, que nos es casi imposible verlos, es como el virus del SIDA que no lo ven lo único que se ve son los anticuerpos que el cuerpo genera o las consecuencias en daños que aparecen en el cuerpo y es de esta misma forma que nosotros podemos ver esas ideas y conductas que nos impiden avanzar.

Si nos preguntamos por que si por 5 años e tratado de incrementar mi fe, de ser mas constante en mi trabajo al Señor, de crecer espiritualmente, de ser mas coherente entre lo que digo creer y mi conducta, por que no lo he logrado? Oro a diario, me levanto y lo primero que hago es dar gracias, asisto a la iglesia, doy mi diezmo, ayudo a mi prójimo, hablo en lenguas, hablo con Dios una y mil conductas propias de una persona con un crecimiento espiritual que aria palidecer de envidia al hombre mas santo y espiritual del mundo, por que no lo logro??? Por que ¿??.

La respuesta puede estar en la palabra “verdad”.

Ejemplo humano

Yo soy una persona que estoy tratando de ser coherente entre lo que digo y hago, volverme una persona que no juzga, una persona que es coherente con la vida que promueve y el testimonio que refleja, entonces inicio el día buscando a Dios de madrugada, ofrezco mi trabajo del día a día, soy gracias por los alimentos, y a media tarde llega mi super-amigo y me cuenta que a sultaníto lo vieron con perenganito haciendo sultanita cosa y yo me resisto y trato de no hacer ningún juicio concientemente, se va mi amigo y me encuentro con mi otros super amigo que desafortunadamente no esta enterado del hecho y el chisme me carcome el alma, oro le pido a Dios para que no se me salga y…… se lo cuento, me justifico pensando que de cualquier modo se iba a enterar y pues que mejor fuente que yo que siempre soy tan sabio y puedo ver el mudo objetivamente, entonces mi amigo me cuenta otro y empiezo a volver mi día en una cadena de juicios y prejuicios de los cuales me quería deshacer de corazón, llego a mi casa y me siento fatal, pues además de todo una de las personas involucradas en el chisme se vio grandemente afectada y tal vez asta me reclame si se entera, la conciencia no me deja vivir y me digo, mañana empezare de nuevo.

Y créanme podemos pasar el resto de nuestras vidas estacionados en el principio y en verdad hacerlo de corazón, pero nos ha faltado preguntarnos realmente que idea preconcebida o que actitud preconcebida nos ha llevado a volver nuestra vida en una cadena de cometarios.

Si analizamos este hecho descubrimos que en algún momento de nuestra vida esta actitud nos trajo algún beneficio, popularidad, algún beneficio económico tal vez, -pero yo quería ser mejor espiritualmente y esto me aleja de mi objetivo- si pero ahora hemos descubierto un deseo mas antiguo y básico, aceptación de cierta gente y créanme que la Biblia es muy clara “no se puede servir a dos amos” y el resultado es evidente, fracasamos en nuestro intento de crecer espiritualmente y no seria mayor problema pero esto nos hace sentir mal.

El primer paso para solucionar un problema es saber que lo tenemos y el segundo y no menos importante es saber que lo causa, así utilizaremos el medicamento adecuado, es doloroso saber que nos somos tan maravillosos como creíamos que éramos, nos desilusiona, asta puede hacer caer nuestra auto estima, pero es sano, duele superar esta adicción a nosotros mismos, pero es benéfica, no es fácil, cuesta mucho trabajo y esfuerzo, pero eso nos acercara a ser lo que siempre deseamos ser, lo que de corazón queremos ser, si en verdad lo queremos.

Podemos hallar mil y un justificantes, caí, me empujo el diablo, los amigos y estas variaran según lo que queramos alcanzar, si estamos a dieta, si queremos ser fieles, si queremos ahorrar y podemos culpara Dios diciendo si EL quería que fuera de otra forma no me habría hecho así, todo esta en manos de Dios y mil y una razón para evadir nuestro libre albedrío, pero no el caso crucificarnos sino tomar la responsabilidad que nos atañe y estar dispuestos a sufrir un poco a sacrificarnos un poco y volver ese objetivo que decimos el único, servir a un solo amo, ser netos, coherentes de una sola pieza, este es el ultimo fin de semana del primer mes de el nuevo año cuanto tiempo mas seguiremos posponiendo el deseo de ser mejores cristianos, verdaderos seguidores de Cristo, yo ya cumplí 40 a que edad empezaras tu?


(Escrito: Gerardo © SdeC Comunidad Cristiana Interdenominacional, Imagen cortesía de ©Corbis)