27 junio 2011

*Predicación 19.06.'11 ‘Estratagema Humana’

Un buen día comprendí porque Dios había creado al hombre y a la mujer con el alma invisible y escondida bajo sus cuerpos perfectos, antes la piel, luego sus órganos y huesos. Imagino que la gente esconde sus intenciones en lo más profundo del alma, amadas con celo íntimo, privado para su prójimo, conservado en las más secretas cavernas, donde solo tiene acceso su conciencia. Si el alma de una persona es horrenda, doy gracias a Dios de que sea invisible, pues así no nos provoca asco, y si su alma es bellísima, doy gracias a Dios de que sea invisible pues así no le es causa de vanagloria.

El alma nos dicta instintos humanos y fieles a sí misma, siempre esta a la defensiva, sus tácticas de guerra y paz deben ser estratagemas confeccionadas artesanalmente y sin censura propia, donde habita el alma debe ser un lugar obscuro, impenetrable, lleno de emociones altamente contrastantes, que si bien un momento rayan en el orgullo, odio o malicia, otro momento son entrega, amor o bondad… todo lo arma con una intrincada estratagema. Tiene la mente una forma de defensa habilitada que trabaja a la velocidad de la luz, desde el momento que interpreta un ataque a su persona o una amenaza que devele su alma y la lleve a la luz o la exponga al público, esta se contrae sumamente y automáticamente, es decir se cierra bajo un blindaje, se activan todas las alarmas… desde el momento que digo: “esta palabra es para ti, porque has sido malo, mientes, eres arrogante con tu hermano al grado del odio, actúas con malicia, flojera y egoísmo vanal..” tu mente activa esta defensa y provoca un plan de rescate, el cerebro es rápido, lo primero que hará es convencerse a sí mismo que: “- el predicador no se refiere a ti cuando dice que has sido malo, sino que lo ha sido otro,” o al menos pensaras que “otros son peores que tu.” Esa es la estratagema más barata y usada, (los demás son responsables de tu pecado, sus pecados son aun peores que los tuyos. Existen estratagemas aun más oscuras, su complejidad depende del cerebro que las crea, los más astutos crean verdaderas obras del arte del escapismo que para que les cuento.

Si bien Dios hizo el alma invisible fue para protegernos del asco, la vergüenza y la desnudez, si hemos clasificado a la gente de "fea" o "bella…" te imaginas si el alma fuera visible… existiría de inmediato otra categoría mas, “gente bella por fuera y fea por dentro (o viceversa)” Dios, que todo lo ve y que conoce el alma humana, en ocasiones se alegra al vernos alabando su nombre con total honestidad y entrega, cuando somos obedientes, sensatos y coherentes con su mensaje, lo mismo que se asquea de una ofrenda apestosa, por ejemplo cuando pretendemos lograr una experiencia mística y llegar ante su presencia aun con el alma en conflicto, con el corazón turbado, con las ideas revueltas, la mente en la luna, con confusiones, dudas, odios, cuando todo lo que tenemos para ofrecerle es una estratagema, una serie de ideas resueltas en la cabeza, en donde tu conciencia y tu corazón han hecho un acuerdo corrupto que se dice a si misma: “-en el tiempo que este en la presencia del Señor, haré todo a un lado, dejaré afuera mis problemas, me olvido por una hora del odio que siento por mi hermano, hago trabajo mental y por unos minutos imagino intensamente que estoy alabando realmente el nombre de Jehová…” pero… realmente no fue una experiencia divina, seguías los acuerdos de tu mente, o seguiste las “instrucciones” del director musical. Como si para estar en la presencia de Jehová tienen que convencerte, como si para que tú escuches la predicación y la entiendas debemos hacerte “coco-wash” ¿Lavas tu cerebro antes de experimentar a Dios? Eso suena como una descarga interna, una proyección de energías negativas llevadas a lo positivo, son culpas que se auto redimen, o como se dice… es mística barata, o como digo: Esta es la estratagema más compleja.

Una estratagema es la acción astuta y engañosa para conseguir algo, especialmente en el arte de la guerra. Pero el alma puede llegar a ser totalmente ingenua, o llega a vivir un estado crítico, donde a terminado por creer sus mentiras y estratagemas. Lo que no sabe el alma, o al menos no puede controlar, es que el cuerpo por fuera devela su color y su forma en un lenguaje corporal, en una lengua que habla verdad o mentira, en unos pies que buscan lugares de perdición o de edificación, en unas manos que trabajan la paz o el conflicto. Para un cristiano, estar atrapado en una estratagema es absolutamente peligroso, una porque no tiene conciencia de la realidad, otra porque está conquistando guerras sin sentido o propósito, y por ultimo porque perderá su alma.

Yo comencé a entender porque el alma era invisible, fue cuando aprendí a ver a las personas según lo que dejaban ver de sí mismas, ayudo mucho lo particular de algunas personas que resultaban ser muy transparentes, ayudo el hecho de que movían la boca para decir cosas pero sus palabras no concordaban con sus acciones, la inteligencia de las palabras contrastaba con la torpeza de sus emociones. Al final, aunque invisible, todos dejábamos ver el alma en total coherencia con lo que creemos, predicábamos y practicábamos, esta ecuación no tiene error. Un creyente que tiene una relación con Jehová, no solo siente el deseo de testificar fielmente lo que siente su corazón, no necesita lavarse el cerebro con estratagemas religiosas y supuestos llamados del espíritu para realizar su labor ministerial o de servicio, además de todo práctica lo que cree y declaran sus labios, esa práctica evidencia el color de su alma y con lo que se ha formado y alimentado últimamente.

El alma en su astucia, que con inteligencia disfrazada de sabiduría se engaña a sí misma con el poder de la mentira. La realidad es otra pero la mentira potencializa lo que en realidad deseamos hacer o decir, la mentira le da un sentido lógico a la estratagema del alma, las mentiras que se dicen o se inventa el cerebro distorsionan no solo a la realidad, sino que alteran completamente el propósito divino, santo o consagrado y apartado que Jehová había intencionado para la humanidad. Toda acción de lucha, guerra o estratagema requiere de una mentira para su elaboración, ejecución y práctica. Una vez dentro, salir es complicado, toda verdad será una amenaza que alterará el sistema que se ha construido, una sería de enredados caminos y puentes alternativos, solo un camino nos lleva a los pies de Jesús, rendidos y exhaustos, hartos de pensar o “adivinar.” El grito de tu espirtu, su clamor ante el alma es cuando te preguntas: ¿Qué quiero realmente en la vida? ¿En qué momento se salió de cause? ¿Por qué es tan difícil comprender? ¿hasta donde he llegado? ¿Es mi vida una farsa? ¿Podre comenzar desde cero?

La clave está en la verdad, todos reconcomemos al menos una verdad absoluta en nuestras vidas, aferrarse a ella es importante, una verdad segura es como un escalón, esta verdad te llevará indudablemente a un sitio seguro, una verdad te lleva a otra verdad y así sucesivamente. En este punto primario habrá quienes al ver la verdad la niegan o la mezclan con una mentira, pero no será tu caso, porque ya pasaste el lumbral, donde se escondía tu alma, es decir, ya tomaste una decisión y has escogido mejorar, habrá quienes prefieren no mentirse y aceptan la realidad tal cual, y tu eres uno de ellos ahora.

¿Te parece difícil? Has un ejercicio básico, para ir practicando: Mírate ahora en un espejo y dite a ti mismo una verdad, aunque sea dolorosa… luego dite otra verdad que sea consecuencia de la anterior, por ejemplo:
- “soy feo, pero para alguien soy bello, soy feo pero alguien aprecia lo bueno en mi”
- “soy pecador, pero sé que Dios me ha perdonado, soy malo pero mi espíritu busca hacer la voluntad de Dios”
- “soy torpe, pero se escuchar y me gusta aprender”
- “soy necio y orgulloso, pero ya lo puedo ver, ya no busco crear una estratagema, pongo en manos de Dios mi ser”
(para este ejercicio es importante no mentir, la mentira no lleva a ningún lugar real)

Nota lo que dice la Biblia al respecto de todo esto: Él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; y a otros, pastores y maestros, a fin de capacitar al pueblo de Dios para la obra de servicio, para edificar el cuerpo de Cristo. De este modo, todos llegaremos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a una humanidad perfecta que se conforme a la plena estatura de Cristo. Así ya no seremos niños, zarandeados por las olas y llevados de aquí para allá por todo viento de enseñanza y por la astucia y los artificios de quienes emplean artimañas engañosas. Más bien, al vivir la verdad con amor, creceremos hasta ser en todo como aquel que es la cabeza, es decir, Cristo. Por su acción todo el cuerpo crece y se edifica en amor, sostenido y ajustado por todos los ligamentos, según la actividad propia de cada miembro. Efesios 4:11-16 (NVI)
en otras versiones dice: Así ya no seremos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las artimañas del errorEfesios 4:14
Un cristiano en forma o que ha encontrado su lugar certero en el cuerpo de Cristo, también puede verse a si mismo y declárar una verdad hermosa como esta:
“Soy apóstol (predicador)”
“Soy profeta (visionario)”
“Soy evangelista (anunciador de buenas noticias)”
“Soy pastor (guía espiritual)”
“Soy maestro (capacitador)”
“Soy discípulo (seguidor-alumno)

¿Quieres conocer tu lugar en el cuerpo de Cristo? o ¿Quieres saber si el lugar que ocupas actualmente es el correcto o es una estratagema? Si deseas saberlo, lee efesio 4 para ti mismo, afirma tu ocupación en la iglesia (colócala en la siguiente línea) diciendo: “Soy ______________ de Dios, para el servicio de la iglesia, y edifico el cuerpo de Cristo en la unidad de la fe, esta verdad no se mueve en la mentira, por lo que no soy sacudido por ningún hecho externo o ajeno al camino de Jesús” Al vivir esta verdad no necesito de ninguna estratagema, soy tal cual… vivo esta verdad con el principio o mandamiento básico que es el amor… estas verdades están en mi alma y reflejan un crecimiento, fruto de que todo lo anterior puede ser visto también como una vedad absoluta, tal y como lo sabe mi alma.
Por estas acciones toda la iglesia se edifica también, según los ministerios o servicios que cada uno ha ligado en este cuerpo de Cristo.

Si al leer lo anterior algo no encuadró en tu vida o se coló alguna mentirilla, debes volver al camino que Dios te propone. La escritura de Efesios 4 nos ofrece una fórmula perfecta, pues estas verdades nos llevan escalón tras escalón a una condición humana ideal para el cuerpo de Cristo, quien es la cabeza y quien nos sugiere seguirle hasta llegar a su misma estatura. En ese propósito las estratagemas o mentiras no tienen cabida.

¿Te imaginas a un miembro que se cree maestro y que es llevado de aquí para allá… estará capacitando en verdad al pueblo de Dios?
¿Te imaginas a un profeta que no comparte las visiones de Dios para su pueblo?
¿Te imaginas a un evangelista que no toca puertas, que no sale a pescar?
¿Te imaginas a un pastor que no lleva al pueblo de Dios a un camino seguro?
¿Te imaginas a un apóstol que no centra su vida en Cristo sino en asuntos secundarios?
¿Te imaginas a un discípulo que pone más atención en emociones vánales, en las cosas del mundo, en el hambre y vacío de su atormentada alma?

Decía hace unos momentos… mírate a ti mismo…
Sin el arte de la estratagema mental… no lo pienses demasiado, solo toma el calificativo auténtico de tu condición como creyente… y listo…
Dite a ti mismo: “Soy esto o soy lo otro” esa es la verdad, y ya.
MUY BIEN… Podemos partir desde esa verdad, honesta y auténtica. Sin este primer paso es imposible avanzar dentro del cuerpo de Cristo, la ilusión de una realidad será falsa como una prótesis plástica en el brazo de un infante, tarde o temprano te das cuenta que el cuerpo de Cristo a crecido y su pequeño brazo no, contrastará visiblemente, esa realidad será avasallante y dolorosa si se negó en el pasado la verdad, esa estratagema deja de ser efectiva, fuera de moda y nada creíble cuando todos a tu alrededor comienzan a tomar su lugar en la iglesia, cada uno con sus ministerios y en crecimiento evidente... no dejes que eso pase, hoy mismo puedes dejar atrás las cosas que te afectan, hoy será sencillo, indoloro, bajo la supervisión de tus hermanos.

O ya te tardaste ¿Cuántos años estas en el conocimiento de tu salvación o de tu fe? Responde con firmeza, pues bien, esos son los años que llevas metido en el cuerpo de Cristo, compara ahora el crecimiento de tus hermanos con el tuyo propio… si algo es demasiado contrastante en cuanto al tamaño de las cosas, es tiempo de tomar conciencia de esa verdad, no te sirve engañarte mas, el momento de la verdad a llegado, y el ministerio nos demanda acciones concretas.

Los evangelistas ya sembraron la semilla de salvación en ti, los profetas ya nos declararon sus visiones, sus maestros ya te enseñaron lo más básico que debías saber, los pastores ya te han mostrado la guía, sus apóstoles continúan predicándote, los discípulos ya dieron testimonio de a quien están siguiendo…
Mírate a ti mismo ahora… ¿No crees que es tiempo ahora de que pongas en función todo aquello que se te ha regalado? Deja de escapar, deja de dormir, deja esa mentira y acércate a la verdad, no solo la contemples desde donde estas.

…Pero cada uno tenga cuidado de cómo construye, porque nadie puede poner un fundamento diferente del que ya está puesto, que es Jesucristo. Si alguien construye sobre este fundamento, ya sea con oro, plata y piedras preciosas, o con madera, heno y paja, su obra se mostrará tal cual es, pues el día del juicio la dejará al descubierto. El fuego la dará a conocer, y pondrá a prueba la calidad del trabajo de cada uno. Si lo que alguien ha construido permanece, recibirá su recompensa, pero si su obra es consumida por las llamas, él sufrirá pérdida. Será salvo, pero como quien pasa por el fuego. 1 Corintios 3:10-15

DTB
(Escrito: C.zar © SdeC Comunidad Cristiana Interdenominacional, Imagen cortesía de ©Corbis)